Familia y amigos muy cercanos, sobretodo caras conocidas!! Las bodas pequeñas están cada vez más de moda. Se acabó eso de no conocer a tus propios invitados!
30, 40, 50, 80…. Las personas que te conocen, que te quieren y a quienes quieres, las personas que van a disfrutar de este momento como si fueran ellos los que se casaran, las que te acompañan día a día, ellas serán las que estarán cerca de vosotros en el que será seguro uno de los momentos más importantes de vuestras vidas.
Primero deberemos escoger el marco de la celebración, es decir el lugar. Una bonita cala frente al mar, un cálido hotel en la costa brava, un pequeño jardín escondido repleto de flores, un bonito velero de madera decorado a base de tul blanco… acertaras seguro si lo haces con cariño
Si hace buen tiempo podremos organizar la comida o la cena al exterior, al ser pocos invitados se podrán utilizar mesas redondas o imperiales, según el caso y la comida estará servida directamente por los camareros. Luces, velas… el ambiente es inmejorable ya que los novios pueden agradecer personalmente a todos los invitados su asistencia, además la diversión está garantizada contratando a un grupo de jazz, una cantante bossa-nova o dúos instrumentales que amenicen la celebración.
Los detalles no pierden protagonismo, yo diría que más bien lo contrario, decoración elegante con un aire romántico bastará para que tus invitados queden encantados.
Otra de las ventajas de celebrar una boda pequeña es evidentemente la económica, el coste se reduce notablemente, también debemos tener en cuenta que existen lugares con mucho encanto a los que solo podréis acceder si sois pocos invitados.
30, 40, 50, 80…. Las personas que te conocen, que te quieren y a quienes quieres, las personas que van a disfrutar de este momento como si fueran ellos los que se casaran, las que te acompañan día a día, ellas serán las que estarán cerca de vosotros en el que será seguro uno de los momentos más importantes de vuestras vidas.
Primero deberemos escoger el marco de la celebración, es decir el lugar. Una bonita cala frente al mar, un cálido hotel en la costa brava, un pequeño jardín escondido repleto de flores, un bonito velero de madera decorado a base de tul blanco… acertaras seguro si lo haces con cariño
Si hace buen tiempo podremos organizar la comida o la cena al exterior, al ser pocos invitados se podrán utilizar mesas redondas o imperiales, según el caso y la comida estará servida directamente por los camareros. Luces, velas… el ambiente es inmejorable ya que los novios pueden agradecer personalmente a todos los invitados su asistencia, además la diversión está garantizada contratando a un grupo de jazz, una cantante bossa-nova o dúos instrumentales que amenicen la celebración.
Los detalles no pierden protagonismo, yo diría que más bien lo contrario, decoración elegante con un aire romántico bastará para que tus invitados queden encantados.
Otra de las ventajas de celebrar una boda pequeña es evidentemente la económica, el coste se reduce notablemente, también debemos tener en cuenta que existen lugares con mucho encanto a los que solo podréis acceder si sois pocos invitados.
Al final, lo realmente importante es rodearte de gente a la que quieres.
MªRosa Pestaña, directora y organizadora de bodas de Que se besen!